en la roca

Yo sigo. Tiro centros y corro a cabecearlos. No importa, comprendo, pero a ver si tiran alguno ustedes. Uno. Es que también quiero atajar un rato. Hoy lunes pero como diumenge. La señoras de los dolores salió con sus amigas. Al mediodía me hice unas fajitas en lo de Bruno Diaz y de postre fuimos a ver la nueva casa que se compró. Es un petit hotel. Sólo falta elegir al botones y el encargado. Vi las habitaciones de servicio y no están nada mal, así que por ahí me anoto en lo de botones. Yo me quedé a mirar el partido de España ahí y la señora salió a atorrantear. Qué bien La Furia, como te decía campeones del mundo. Ahora no los para nadie. Y ya sabemos como termina, afuera en 4tos. Después me acercaron a casa con la pequeña cetácea como regalo. 5 minutos más tardes la vida me empujó a tener que debatirme entre el maltrato a menores o aplicarme una pequeña dosis de tetrahidrocannabinol. Fue lo más saludable. Abro el blog. Platico con el Sensei. Miro los resúmenes del mundial. Y me emprendo a la difícil tarea de cambiar los cds del auto. No soporto no tener la posibilidad de enchufar un ipod al auto. Eso te resuelve mucho. Metes 500 discos y tenés un abanico muy grande. Ponés de todo. Te alcanza para poner lo necesario. Pero en 32 se te complica. Primero porque no andás cambiando los discos todos los días. Y segundo porque el estado de animo de hoy te influencia sobre tu elección y te hace coger cds más tranquilos o más power. Los míos son días de nervios. Me agarrás justo en proceso de hacer el muestrario para verano. Me pongo irascible muy fácilmente. Tengo que bajar un cambio. El porcentaje tan alto de discos denominados por los amantes de las etiquetas como música chill-out lo acreditan. El último que pillé fue uno de Israel Vibrations. Su disco On The Rock. Casualmente como se llama el disco del ex Salmón ahora debenido a Limpia Fondo de pecera. Me voy buceando.