llamada a convención

Domingo de misa. Nos levantamos media mañana. Necesitaba algunos ingredientes y nos apersonamos en el Carrefour más cercano. Pan, jamón, unos tomates y una cabecita de ajo. El oliva aguardaba en casa. Entrada resuelta. De primero y único: dados de pollo, panceta ahumada, pimiento salteado, cebolla caramelizada, granos de maíz y por último los dados de tomate cerraban la elección. Una fajitas abrigaban tus preferencias. Si veías que iban a pasar frío la forrabas internamente con un quesito crema untable. Unas chibchas en el frizer y para los lactantes gaseosa de marca reconocida para empujar unos Fusillis. Los comensales invitados ameritaban una producción culinaria difícilmente vista un domingo. Sensei "El Mágico" acompañado de su dulce familia. Jay Jay. Acompañado todo con una charla amena nos prestamos a la ceremonia religiosa. De postre una variedad de productos helados que gentilmente trajeron los invitados. En la sobremesa el Sensei nos deleitó con unos paces mágicos donde, por medio de la materealización, hizo aparecer un hermoso retoño de la planta madre. Me deslumbró por que hacía tiempo que no visualizaba aquel milagro de la naturaleza. La amada de Romeo nos advirtió de su poder. Lo hizo insistentemente en varias oportunidades a las que yo no quise prestar oído. Omití por completo. ¿A papá mono? El azar y la necesidad de racionar el material quiso que esto no pasara a mayores. Construí un prototipo a escala 1/100. Ya no hay 25 gorriones, sino 13. Chernobyl de clase B. 3 besos y ya estábamos enamorados. Tremendo. El Sensei no quizo faltarle a la tarde y le hizo honores. Una atención para conmigo sabiéndolo ya lejos de las hierbas aromáticas. Llegaron cuentos de inmigrantes. Algunas fechorías del Pequeño Saltamontes Negro endulzaron unos cafelitos que se echó la Nespresso®. Quedamos en emprender una compañía que organice una convención latinoamericana para esta semana santa próxima. Se llegó a la conclusión que debería ser sobre las costas que baña el río Paraná. Que mejor lugar que Rosario para unos integrantes de la Generación Barcelona Messi. O mejor llamada la Barcelona de la Manito.