[Washington, como habíamos hablado, no te olvides de mandarme el documento que ando con ganas de viajar a Uruguay seguido y me vendría bien contar con eso por sí me la piden en la farmacia.]
Cambiar no cambió nada, dice el poeta. Pollo con fideos con manteca de penitencia para Turquesas. Pippin no, a tanto no llega. Y el Niño recién arribado mantiene su menú mediterráneo. Llegó bronceado y con ganas de retorno. Hay equipo retruca Johnny con la boca llena mientras apura un vaso de coca para bajar los manteca. El ya lo tiene 70 / 30 a boca de urna. Es que ya no aguanta una milanesa más que no sea de lomo. Lo mató ver ese caralibro donde el Niño entraba al mediterráneo de cabeza y usaba de trampolín el barquito del capo de las lonas. ¿Porqué me tengo que estar perdiendo esto? Estamos condenados a vivir errantes. Merodea el fantasma del retorno. Yo, incluso tuve una propuesta de fuga con radicación en la zona balnearia de Sitges de un caballero muy buen mozo que ustedes conocen su identidad y que yo elijo proteger. Y a vos tonto te digo que me lo dejes pensar un poco más. Es que me encariñé de las tres Marías.
Un pésame a la famila Viutek, con mucha tristeza despedimos a la última, a la 150 que se subió a un chatarrero con vergüenza y se perdió por las góndolas donde el Nene gambeteaba latas de tomate y convertía goles en la góndola de lácteos.
Un pedido
a los que viven cerca de Perla, que pasen a visitarla que la veo muy nerviosa porque se comenta que Julio habría encontrado faena en la pornografía gay. Yo opino que es un curro como cualquier otro. Dale para adelante campeón. Vos decís hasta donde.