sábado, 17 de julio de 2010

me lo encontré

Barcelona entera aparecía a mis pies y quise creer que cuando abriese aquellas mis nuevas ventanas sus calles me susurrarían historias al anochecer y secretos al oído para que yo los atrapase sobre el papel y se los contase a quien quisiera escucharlos. Vidal tenía su exuberante y señorial torre de marfil en lo más serrano y elegante de Pedralbes, rodeada de montes, árboles y cielos de ensueño. Yo tendría mi siniestro torreón levantado sobre las calles más antiguas y tenebrosas de la ciudad, rodeado de los miasmas y tinieblas de aquella necrópolis que los poetas y los asesinos habían llamado la “Rosa de Fuego”. Carlos Ruiz Zafón - El juego del angel.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

bellesssa!
julio

Anónimo dijo...

yo lei la sombra del viento, muy bueno
perla