La elección fue unánimemente aprobada por el consejo de sabios y la puesta en marcha hacia la desconocida babilon, urgente.
Nadie podría decir que fue un proyecto fácil, la decisión sobre los materiales a usar y posibles formatos para la milagrosa balsa, fueron apoteósicos.
La construcción fue también una tarea ardua. Él, el elegido, se adentro en sus quehaceres, aportando todo el conocimiento y experiencia adquirida durante su periodo de letargo solitario en tierras orientales.
Luego de un largo lustro de incertidumbre persentó al consejo su obra. "Os presento el escarbadientes magico" dijo con cierto misterio... y la expedicion partio sin dudar hacia su destino.
Se dice que los viajeros llegaron a lugares donde nunca nadie se atrevió a llegar. También que se apoderaron de la llave mágica, conociendo así, el camino exacto hacia los jardines imperiales, morada de osados expedicionarios. La historia fue forjada...
No hay comentarios:
Publicar un comentario