martes, 8 de marzo de 2011

gracias

Nunca vi en otro jugador tanta elegancia a la hora de pararla con el pecho y salir hacia la banda. Nunca volveré a ver tanta jerarquía y serenidad a la hora de poner esa asistencia mágica que lo hacia único.
Supo vestir la banda roja en su pecho, allá en la paz, y donde pocos se animaron a ir, él dio cátedra de exquisitofútbol.Futbol Champagne!!, gritaban.
Luego ya en el juego de las estrellas Valldorsala, supo ponerse el equipo al hombro. Lideró a un grupo de futbolistas difíciles, muchas caras jóvenes y sin experiencia, muchas tarjetas rojas, llegando incluso a agredirfísicamente a árbitros. Y así el equipo en ocasiones terminaba diezmado. Sefiltro que se concidero la suspension del equipo por parte de los organizadores.
A pesar de todo obtuvieron un discreto sexto puesto (si no me equivoco) en una liga muy competitiva de ocho equpos.
Luego a pesar del pedido de sus compañeros por que siguiera, renuncio al pepino mecánico dejando paso a nuevas generaciones de brillantes futbolistas.
Gracias Leo magico Dubuch por desplegar tu juego cosmico.
(ahora nos va a encontrar en google!!!bienvenido Leo)

1 comentario:

Beto, Poeta Maldito dijo...

su prestancia y elagancia para salir jugando con pelota dominada. nunca una bartoleada, siempre redonda. lo que siempre me dejó sin habla fue los magníficos cambio de frente que tiraba, la cruzaba de lado a lado y te la ponía en los pies. un as del balompié.