sábado, 4 de abril de 2009

C3 INFERNO

En busca de aquella milarda cuartetera surcaron las veloces rutas costeras. No fue una regreso mas, no no, fue una vuelta milenaria. 
Como si los bólidos, 3 clios del infierno, hubieran tomado vida propia y sin proponernoslo, comenzamos una carrera a contra reloj. 
No fue una lucha temeraria, faltaba mas, fue casi como una celebración. Fue una competición leal, con la camaradería que solo tienen aquellos que buscan un mismo objetivo, pero sin dejar de lado el instinto ganador que se había apoderado nosotros. 
Esta, era una carrera que no solo había que ganar, había que ganarla pero con estilo. (esto nunca se hablo, pero yo se que es asi).
Creo que no vale de mucho decir que El Rayo Blanco será recordado por llegar primero esa tarde, porque lo que realmente importa es que esa tarde nacio C3  Inferno, el legendario club estelar, al que luego se sumaron modernos invitados especiales...

4 comentarios:

Sensei dijo...

Volvía de Blanes con la familia y mi casa rodante por la A-7. Los vi pasar. Fue un instante pero como maniobraban por los carriles era un lujo.
Termine comprandome un Clio, me inscribi en el club y cambio la vida.
Gracias C3 Infierno!

Anónimo dijo...

yo tenia un clio y todo iba de maravillas, pero un dia el exito se me subio a la cabeza (como Marco) y cambie de coche... mi vida cambio por completo, ya no era el mismo
Ahora tengo otro clio y soy de c3. La vida me sonrie!.

Airton S.

Keke Rosberg dijo...

Era más, era un sentimiento incontrolable. Mucho se hablé pero habría que haber estado ahí. Yo fui testigo como Arturo Bonin. Cuando me mudé a Bs As me compré un clio y le puse el anhelado distintivo pero ya no era lo mismo. Varias noches se me vió correr sin rumbo por las autopista buscando otra carrera legendaria pero sin exito. Gracias por trerme a la memoria tremendo recuerdo.

Anónimo dijo...

gracias keke.
julio