sábado, 26 de diciembre de 2009

conversando con mi amiga paraguaya


Yo ya estuve de ese lado. Están empezando bien. Lo importante es saberlo llorar. Los hombres también lloran. Cuando un amigo o familiar se muere hay que llorarlo. Cuando uno deja una ciudad que amó atrás también debe llorarla. Muere la noche navideña. Mágica. Aunque figure San Esteban yo la empecé a escribir el 25. Llueve y relampaguea sobre el Monumental. Noche eléctrica. Las ninfas duermen. Me cansé de quemarme los dedos. Hoy metí cartón. Por primera vez. Por suerte antes de que venga la lluvia. Que te puedo decir. A mi me gusta extrañar. Yo disfruto de mi melancolía. No es tristeza. Son 5 minutos al día más o menos. Pero los disfruto. Algo que pasa, una canción que pueden ser miles, en la radio por un mail que manda alguién que se tortura desde el exilio, o pueden ser millones de cosas diferentes que te teletrasportan a un sucucho en Grácia que se hace llamar Agua de Cóco. Lookeado muy Motown. Pelis de negros en los 70s, muy afros, muy de pantalones amarillos apretados, camisa de pelo en pecho y ellas tan putas. Por los parlantes suena Innervision. I’m too high. I’m too high. But I ain’t touched the sky. Tirado en el suelo hablando de filosofía barata y zapatos de goma. Y te crees que te poseyó el demonio o de tanto ver ¿Quieres ser John Malkovich? [Cómo ser... en la península] y te convertiste en Jim Morrison. Y son los fucking 70s. De camino a buscar la señora de los dolores paso por una reconocida imprenta digital y ahora en varano, que tienen todo abierto, aminoro, saco la cabeza y le meto una buena inhalada a la tinta solvente. Solo para que me lleve hasta allá en un minuto. Suena el Pity en el auto. Agarro por [y mientras te digo esto abro una pestaña y me voy al google map para recorrerlo con el mouse] Carrer de la Industria, a mi izquierda el San Pau, voy atrás de un Seat negro que me lleva paseando, movete quillo, edificios nuevos, en el Telepizza cargo al Peruvian Seal, uy el bicing, tiraron abajo la caserna de navas, bajo hasta la Meridiana, todavía me espera la zapatería Croc, siguen las obras en la estación Sagrera, el tristemente célebre Corte Inglés, estación Sant Andreu, alguna vez lo supe dejar a Washington al final de Comarca, C-58 y tiro la Gran Melba, viene cargada, Autopista del Vallés, Moncada i Reixac, una BP, paso de largo salida Cerdanyola, voy por el Baricentro, antes el Cerdanyola Fútbol Club, salida a A-7, el gran Hotel Barberá Parc, pero voy por el camino largo, Ofiprix, carrer Arquimides, Ronda de l'Únió, surfeando subidas y bajadas con el bólido granate, Castell de Barberá, Coloma, otra BP, d'Arraona, la A-7 por arriba, CBL y la lona roja del León que vendió Melba y eso le permite ahora irse al caribe, salgo, paso por abajo de d'Arroana y entro al poligono Can Salvatella, Torrent Tortuguer, emerreuve y el final de mi camino, estaciono, 8:01 y marco tarjeta. Nostalgia. Muchos recuerdos. Pero me resuenan las palabras sabias del Doctor diciendome que su espíritu está tatando de encontrar una buena razón para justificar vivir en este lugar. Pero ahora no quiero hacerte pensar porque pensar tanto no es bueno, eso me lo dijo un viejo que de tristeza se fue al cielo. Yo le retruco que ya sabe que es dificil dejar el veneno.

6 comentarios:

julio dijo...

veo que seguis los consejos de la experiencia.
El carton en forma de filtro es el siguiente paso.
Primero no armabas, decias que nunca. Ahora ya estas mechando algun filtro... Luego los rolaras al reves (sacando el excedente de papel)como el magmanimo ferranet.
Probalo, haceme caso(con el dedito)

El Contra dijo...

La Rusa en el street view no sale, pero si la silla con la botella de agua! una curranta la piba

Sensei dijo...

recuerdo una ida a la base, ya en los ultimos tiempos. los 4 en el 4to clio tomando mate con masas.

Beto, Poeta Maldito dijo...

dicen que un tal jp de rosario como despedida se hizo atender por la enfermera rusa del amor.

julio dijo...

si si mates y masas. muy bueno

Tony dijo...

se la conoce como la rusa o "la maga" para los íntimos